miércoles, 4 de febrero de 2015

Formación de Médicos COMPETENTES en la promoción a la salud: UN LLAMADO A LA ACCIÓN


En el mundo globalizado del presente, las enfermedades de individuos y poblaciones se manifiestan de forma compleja. El aspirar a un estado de salud óptimo se convierte en un fenómeno que requiere múltiples acciones y un abordaje que reconozca la naturaleza socioecológica de los problemas asociados a la salud y a la enfermedad.



Más que nunca hay un llamado a las instituciones formadoras de médicos, al igual que otros profesionales  de la salud, enfocar sus enseñanzas a que desarrollen destrezas y competencias para responder a la complejidad de los asuntos  de salud que afectan a la población con el fin  de mitiga el impacto  en la salud publica e individual.



miércoles, 28 de enero de 2015

NUEVOS DESAFÍOS PARA LOS SISTEMAS DE SALUD

Actualmente los sistemas de salud se desempeñan  en un contexto caracterizado por fenómenos rápidos que demandan cambios también rápidos y drásticos en la atención de la salud.

Entre estos cambios podemos destacar: 
La transición epidemiologica, demográfica, así como la "persistencia de la agenda inconclusa" y las "enfermedades desatendidas", emergentes y re-emergentes; la la acelerada y descontrolada urbanización y los efectos del cambio climático; el deterioro de la seguridad social y la introducción creciente, acelerada y deficiente regulación de tecnologías diagnosticas y terapéuticas.  

En nuestro país como en muchos otros, prevalece un modelo de atención centrado en el medico, este modelo estimula la utilización exagerada de productos médicos ligados con la curación, la que queda vinculada con el acto de consumo, promueve como eje diagnostico el uso de la alta tecnología y como eje terapéutico el sobre-uso farmacológico y tecnológico, basado en la prescripción  y las ganancias del complejo medico-industrial. Esto lleva a un modelo poco efectivo ya que se centra en la atención episodica de cuadros agudos o complicaciones de condiciones crónicas, por lo que se organiza en torno a la oferta por niveles de complejidad, causando la atención fragmentada, que no garantiza el continuo asistencial y la integridad de la atención.

Este modelo medico-céntrico ya no es sustentable, ya que esta centrado en la atención especializada y los hospitales, creando así alta dependencia y consumo de tecnologías con una tendencia a la super-especialización, generando servicios poco coherente con las necesidades de los individuos, las familias y las comunidades, cuyo resultado es un alto grado de insatisfacción.
Dada a la creciente prevalencia de enfermedades y condiciones crónicas de la población, este modelo se muestra inadecuado por proveer atención continua, integral, integrada y de calidad. Por lo que es NECESARIO en cambio radical del modelo de atención, que sea capaz de resolver estos nuevo desafíos.



Innovar en el modelo de atención significa interpretar y convertir en actos concretos los valores, conceptos, creencias, principios y prioridades de la sociedad, ademas de combinar acciones para promover la salud, prevenir daños y enfermedades, limitar la discapacidad y crear las condiciones para vivir con las enfermedades crónicas. Este ultimo componente es crucial para innovar el modelo de atención y con ello la demanda de los servicios de salud con nuevas actitudes, competencias y practicas clínicas. 

No se trata solo de luchar contra una enfermedad, sino a la vez de admitir que ser portador de una condición crónica es parte integrante de la vida de muchas personas
  
Los equipos de salud son los encargados de implementar el modelo de atención a la salud en interacción con otros actores sociales, las acciones son ejecutada en conjunto con la comunidad. No es un asunto solo de la medicina, sin la sociedad, para ello el incorporar métodos, técnicas, instrumentos, procesos, tiempo de trabajo para le accionar social a favor de la salud y combina los abordajes de la población e individual.



martes, 6 de enero de 2015

¿Hacia dónde debe ir la vigilancia epidemiológica en México?

Los grandes problemas de Salud, obliga a replantear los enfoques y prioridades de atención, muchos de estos problemas requieren necesariamente del fortalecimiento del cuidado de la salud y la incorporación de estilos de vida saludables de ahí la necesidad de promover, la búsqueda y/o formación de profesionales con conocimientos y actitudes necesarios para hacer frente a la transición epidemiológica en los diferentes niveles de operación del Sector Salud, debiendo ser capaces de articular y despertar el entusiasmo de una misión compartida para lograr un verdadero posicionamiento de las políticas en salud pública.

Esto implicará estar a la vanguardia, y estar informado de todo lo que sucede en su entorno social y ambiental por lo que el epidemiólogo deberá orientar las acciones de control y las políticas en promisión de la salud, con el fin de alcanzar un cambio en los estilos de vida.

La modificación en los patrones de enfermedad y el cambio en la estructura de la población, son elementos indispensables en la planificación de los sistemas de salud y en los programas de control y erradicación de enfermedades vigentes en el país.

El perfil de la salud en la población plantea nuevos retos para su atención y seguimiento:

a.Continúa la atención de enfermedades transmisibles

b.Atención de enfermedades no transmisibles

c.Enfermedades creadas por el hombre (Violencia y accidentes)

«Si quieres una sociedad sana, no empieces por comprar medicamento y hacerte de tecnología, primero has de saber evocar en los médicos el anhelo de una sociedad más educada y autocritica de forma de vida»

lunes, 15 de diciembre de 2014

¿El sistema de salud Mexicano está diseñado para tratar enfermedades crónico-degenerativas?

El Sistema de Salud mexicano fue originalmente diseñado para atender enfermedades infecciosas, tales como la diarrea, la neumonía y el paludismo, que fueron durante décadas las principales causas de muerte en el país. En consecuencia, el sistema se conformó para poder diagnosticar de forma rápida padecimientos infecciosos, recetar medicamentos durante un tiempo relativamente corto y curar la enfermedad, tras lo cual el paciente regresaría a su vida normal. Sin embargo, en las décadas pasadas el país ha presentado una transición epidemiológica en la cual ha
aumentado la prevalencia de enfermedades crónico-degenerativas, que actualmente presentan la mayor tasa de mortalidad.

El problema es que el modelo de tratamiento para este tipo de enfermedades es sustancialmente diferente al que contempla un sistema dirigido a atender enfermedades infecciosas. Las Enfermedades Crónicas requieren monitoreo constante y especializado; requieren también que el paciente entienda su enfermedad, asuma una responsabilidad mucho más puntual y duradera sobre la misma; y que cambie sus costumbres y estilo de vida. Estructuralmente, el Sistema de Salud mexicano – como el de la mayoría de los países – no está preparado para la epidemia de Diabetes. Síntoma de esto son los resultados de la ENSANUT 2012 respecto a la atención médica a personas con Diabetes: de acuerdo con esta encuesta, el 63.2 por ciento de las personas con Diabetes encuestadas reportó cumplir con la periodicidad de consultas médicas, donde se realizaron detecciones de colesterol y triglicéridos a 70.6 por ciento de los pacientes; 44.1 por ciento refirió toma de presión arterial al menos una vez al mes; un porcentaje pequeño reportó seguir una vigilancia estricta del control metabólico, ya sea con la determinación de glucosa en sangre (21.7 por ciento) o de hemoglobina glucosilada (7.7 por ciento); 8.6 por ciento reportó revisiones oftalmológicas y 14.7 por ciento revisiones de pies.

lunes, 20 de octubre de 2014

Antecedentes de la Vigilancia Epidemiologica en México

El origen de la notificación periódica de las enfermedades infecto contagiosas se remonta al año 1944, un año después de la creación de la Secretaría de Salubridad y Asistencia Pública (hoy Secretaría de Salud) con la notificación de 14 enfermedades transmisibles (Brucelosis, Difteria, Disentería, Lepra, Meningitis, Paludismo, Poliomielitis, Sarampión, Sífilis, Tifo, Tifoidea, Tosferina, Tuberculosis y Viruela) y el envío de la información a la Dirección General de Epidemiología, institución designada por la Secretaría de Salubridad y Asistencia Pública, como la responsable de analizar y difundir los resultados en el Boletín Epidemiológico mensual y bimensual.

Al año siguiente, en 1945 se creó y operó la hoja epidemiológica que concentraba la información de morbilidad, la cual fue evolucionando hasta la década de los setenta en que se conoció como formato de reporte

EPI-1-79, basado en la novena Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE-9) con 50 diagnósticos, organizados en 13 grupos de enfermedades, y se crea la Notificación Semanal de Casos Nuevos de Enfermedad.

Para 1985 se sentaron las bases de un nuevo formato de notificación semanal denominado EPI- 1-85, con 88 diagnósticos pertenecientes a 10 grupos de enfermedades, este formato incluía Diabetes mellitus, Hipertensión arterial y dos Neoplasias dentro de las enfermedades crónico degenerativas. En esta época se inició el empleo de computadoras para concentrar y organizar los datos en modo de hojas de cálculo, además se fortaleció la comunicación interinstitucional.

Hacia 1994 se inició la conformación del SUIVE, el cual se estableció mediante el Acuerdo Secretarial
número 130, firmado en 1995, en éste se estableció el compromiso de todo el Sector Salud para utilizar el formato EPI-1-95 con 69 diagnósticos distribuidos en 9 grupos de enfermedades: la captura de los datos se haría en el programa de cómputo SUAVE, con base en la NOM-017- SSA2-1994, Para la vigilancia epidemiológica.


A partir de ese momento la notificación semanal cobró mayor importancia al homologar los criterios de reporte en el programa SUAVE; posteriormente en el año 2000 el formato de registro cambió el nombre por SUIVE-1-2000, el cual contenía 96 diagnósticos correspondientes a 12 grupos de enfermedades, en este se habían agregado otras enfermedades crónico degenerativas como Desnutrición, Neoplasias y Accidentes. Al finalizar el año 2002, el formato cambió por el de SUIVE-1-2003 con 97 diagnósticos, 13 grupos de enfermedades y la inclusión por sexo masculino y sexo femenino.

En el año 2004 el formato recibió el nombre de SUIVE-1-2004 con 98 diagnósticos distribuidos en 13 grupos de enfermedades predefinidas, además de las opciones de registro de enfermedades de interés local y/o regional, y de otras consideradas de notificación inmediata. Este formato está basados en la Clasificación Estadística Internacional de Enfermedades y Problemas Relacionados con la Salud, Décima Revisión (CIE-10) concentrándose en el programa SUAVE
versión 4.

Desde el año 2007 la Notificación Semanal de Casos Nuevos de Enfermedad se realiza a través del formato SUIVE-1-20071 el cual reporta 113 enfermedades; de éstas, 100 están distribuidas en 13 grupos y las 13 restantes son enfermedades que por su importancia están sujetas a notificación inmediata además de incluirse en el reporte semanal: Fiebre amarilla, Peste, Fiebre recurrente transmitida por piojos, Tifo epidémico, Tifo murino, Fiebre manchada, Encefalitis equina venezolana, Meningitis por Haemophilus influenzae, Fiebre del oeste del Nilo, Efectos indeseables de las vacunas y/o substancias biológicas, Poliomielitis, Meningoencefalitis amebiana primaria e Intoxicación por picadura de Abeja Africana. También se hace un llamado a los médicos para que notifiquen los eventos considerados como Urgencias epidemiológicas y cualquier tipo de fiebre hemorrágica.


MARCO JURÍDICO

Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos

Artículo 4°, párrafo 3°, habla del derecho social de toda persona a la protección de la salud.










Ley General de Salud

El título octavo hace referencia a la prevención y control de enfermedades y accidentes conformado en cuatro capítulos: Disposiciones comunes, Enfermedades transmisibles, Enfermedades no transmisibles y Accidentes.

miércoles, 15 de octubre de 2014

Sistema de Vigilancia Epidemiologica

Este blog se me hace de suma importancia para todos los que trabajamos en el área de la salud, por una mala costumbre solo se cree que es tarea de los epidemiologos hacer esta actividad.
El panorama de salud en México ha presentado, desde mediados del siglo pasado, profundas transformaciones condicionadas por cambios en la estructura de la población, estilos de vida y estatus socio económico, sin dejar de reconocer el papel que han tenido los servicios de salud y la incorporación de nuevas tecnologías médicas, para atender los problemas de salud de la población.
Actualmente nuestro país muestra modificaciones favorables en los perfiles de salud de amplios sectores de la población, sin embargo también persisten importantes rezagos que requieren grandes recursos para su prevención y control. 
La transición en salud que se experimenta, esta caracterizada por el traslape de dos desafíos: el rezago en salud y los riesgos emergentes. En las últimas décadas, las principales causas de mortalidad, encabezadas por las enfermedades transmisibles fueron sustituidas de manera paulatina por padecimientos no transmisibles y otros problemas de importancia epidemiológica, entre los que se pueden mencionar a las enfermedades cardiovasculares, el cáncer, los padecimientos mentales, las adicciones y las lesiones por causa externa, lo que refleja un incremento en los riesgos asociados a la industrialización y la urbanización y que concentran entre otros, dos tercios de la mortalidad general.

En este cambio hay que agregar el surgimiento de infecciones como el SIDA, el resurgimiento de infecciones que parecían controladas como la tuberculosis, el paludismo, el cólera y el dengue, además la resistencia antimicrobiana y el advenimiento cada vez mayor de la farmacodependencia y la contaminación ambiental, que sitúan a países como el nuestro en graves problemas de demanda y contra oferta de servicios, al no disponer de todos los recursos necesarios para su adecuada atención

Los desafíos y responsabilidades en materia de salud pública continúan siendo un reto para los servicios de salud, lo que necesariamente requiere de la constante formación de más y mejores recursos humanos y del establecimiento de mecanismos adecuados de información y vigilancia epidemiológica eficientes que permitan orientar la prestación de los servicios de manera adecuada y garantizar así, la solución de los problemas de la población en los lugares donde más se necesita. Los sistemas de información y vigilancia epidemiológica enmarcados en el Sistema Nacional de Vigilancia Epidemiológica (SINAVE), han permitido conocer con mayor precisión, el estado de salud de la población y sus factores de riesgo. 

Con la creación del SINAVE desde 1995, se estableció el Sistema Único de Información para la Vigilancia Epidemiológica (SUIVE) el cual sistematiza la información de morbilidad y mortalidad con participación de todo el Sector. Con el establecimiento del SUIVE, se homogeneizaron los criterios, formatos y procedimientos de notificación en las distintas instituciones del SNS

Los componentes del SUIVE son: el Sistema de Notificación Semanal de Casos Nuevos (SUAVE); la Red Hospitalaria para la Vigilancia Epidemiológica (RHOVE); el Sistema Epidemiológico y Estadístico de las Defunciones (SEED).

El SINAVE tiene como objetivo la obtención de conocimientos oportunos, uniformes completos y confiables referentes a los daños y riesgos de la población, a partir de la información generada en los servicios de salud en los ámbitos local, intermedio y estatal



Dispone de un órgano normativo y de coordinación en el nivel nacional, que facilita, fomenta y orienta el quehacer epidemiológico en el país, denominado Comité Nacional para la Vigilancia Epidemiológica (CONAVE); y se constituye por todas las instituciones del Sistema Nacional de Salud. El CONAVE está representado, en cada entidad federativa, por Comités Estatales (CEVE) que coordinan los esfuerzos de todas las instituciones de salud en cada entidad federativa.

lunes, 6 de octubre de 2014

PERFIL & PANORAMA EPIDEMIOLOGICO NACIONAL

Para hablar de este tema tenemos que comenzar a diferenciar entre Perfil Epidemiológico y Panorama Epidemiologico.

El Perfil Epidemiológico "es el estudio de la morbilidad, la mortalidad y los factores de riesgo, teniendo en cuenta las características geográficas, la población y el tiempo."

El perfil epidemiológico de cualquier grupo social recoge el conjunto de situaciones  objetivas o características que conforman aquello que se denomina ‘la carga  de enfermedades’ que padece ese grupo social o la población en general: esas características o situaciones objetivas se refieren a la morbilidad, a la mortalidad y a  aquellos factores que las determinan.


Desde la perspectiva del desarrollo humano, hay que palpar y visibilizar las condiciones sanitarias para documentar las tendencias, los logros obtenidos, la agenda pendiente y los nuevos desafíos en el  abordaje del tema de su salud. Es importante identificar la magnitud de los problemas  de salud integral, cómo han evolucionado en años recientes, cuáles son los nuevos grupos en riesgo, y cuál es su entorno socioeconómico, cultural y territorial.

En tal sentido, el perfil permitirá conocer las características del grupo en relación a  otros grupos, y definir los parámetros y prioridades de la respuesta social organizada,  tanto en términos de los lineamientos político-estratégicos, el compromiso financiero  con ese marco y las decisiones técnicas y de organización que se deban tomar para  lograr los cambios.

El Panorama Epidemiológico es el aspecto general que presenta un problema de salud o enfermedad que afectan a las comunidades humanas que comparten alguna(s) característica(s) que los une, basándose en el análisis de su situación de salud, la investigación epidemiológica, la evaluación de tecnologías, y de su vigilancia epidemiológica.

Perfil Epidemiológico de México; México atraviesa una transición epidemiológica que se caracteriza por el predominio de  enfermedades crónico-degenerativas y el rezago de algunas patologías de tipo infecciosas, algunas  de las cuales son altamente prevenibles. Este panorama pone en perspectiva las condiciones de  salud de la población y se convierte en un instrumento a tener en cuenta para enfocar las acciones en  salud. Uno de los logros sociales más sobresalientes de México en el siglo XX fue el notable descenso de la mortalidad, lo cual se ve reflejado en el perfil epidemiológico, indicativo de una sustantiva mejora en las condiciones generales de vida.